Ver a través del sonido: el nuevo reto de la ciencia

¿Será posible que algún día las personas con una discapacidad visual vean el mundo como lo hacemos nosotros?

Esa es una pregunta que científicos estudian bajo el principio de la ecolocalización humana, una forma ver el mundo a través del sonido, tal y como lo hacen los murciélagos.

Hoy se sabe que las personas que han nacido ciegas o han perdido la visión en un momento de la vida, aprenden a utilizar diversos sonidos para recorrer su camino con seguridad a través de los entornos. Esto lo hacen al escuchar el tono, la sonoridad y el timbre de los ecos resultantes.

Un ejemplo es la forma en que usan los bastones para escuchar el sonido que rebota en las paredes y otros objetos. También se pueden usar clics y los ruidos de chasquido.

Bo Schenkman, profesor asociado del KTH Royal Institute of Technology de Estocolmo, presentó su trabajo sobre la ecolocalización humana frente a otros científicos. En él se detalla cómo las personas sin vista pueden ser muy propensas a detectar no sólo el tono y el volumen de los ecos, sino también el timbre, particularmente los aspectos de nitidez del timbre.

Esto, asegura Schenkman, hace que las personas puedan realmente ser capaces de adquirir la capacidad de distinguir mejor las frecuencias más altas. También logró descubrir que las personas con discapacidades visuales son mejores que los videntes ya que pueden “separar” los sonidos superpuestos para juzgar su origen.

El científico afirmó que mientras el tipo de ecolocalización utilizado por los murciélagos y los seres humanos es similar, los humanos tienen la capacidad de escuchar tanto un sonido, como su eco. Los murciélagos sólo se basan en el eco para su navegación.

“Es un subproducto de nuestro sistema auditivo que podamos usar la ecolocalización, por lo que no somos tan competentes como los murciélagos”, indicó Schenkman durante la presentación de sus estudios en Boston, Estados Unidos.

Schenkman aseguró que todavía hay mucho que aprender al comparar la forma en que las personas y los murciélagos utilizan ecos de manera diferente, pero el objetivo no cambia: utilizar su trabajo para mejorar las formas de entrenar a las personas sin visión para que puedan andar mejor en el mundo a través del sonido.

Por Vicente Rendón

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Loading...
Facebook Messenger for Wordpress
Abrir chat
1
Contactanos!
Hola
Como podemos ayudarte el día de hoy?